jueves, 4 de diciembre de 2008

UNO ESCINDIDO EN DOS

Uno escindido en dos cuerpos.
Los nombres, lo de menos excepto cuando nos buscamos.
Tus manos me sostienen para que lo grotesco no alcance mis pies.
Y las mías, más menudas, impiden que ladees la cabeza a otros mares más fieros.

Y así camino, caminamos.
Agarrada a tu nuca, enganchado a mi costado.
Soslayando azares, caudales sin cortesías
mientras llueve en los demás.

Y no lloverá eternamente
se lamenta el semidiós en su venganza,
en su obstinación titánica por apartarnos
mientras salpica imprecaciones en los demás.

Uno ocupando dos huecos.
Los géneros, lo de menos excepto cuando nos encontramos.
Tus labios bloquean aquello que no quieres que escuche.
Y de los míos, más frágiles, se despegan palabras con forma de beso cosiéndose en tu rostro.

Y así buceo, buceamos.
Serpenteo en tu dorso, cosquilleas mi garganta.
Apartando fauces, corrientes furiosas
mientras se ahogan los demás.

Y no lloverá eternamente
se maldice el antihéroe
alejándose del uno escindido en dos
y arrastrando a quien no miraba de cara al amor.

No hay comentarios: